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Un director de arte en busca de agencia ha diseñado una acción de marketing directo muy original que están recibiendo esta semana diferentes agencias. Se trata de una caja cerrada y envuelta en papel kraft en la que sólo se podía ver la dirección del destinatario y el mensaje «Quiero que me la chupes». Al abrirla, el receptor se encontraba con una bolsa de transfusión sanguínea con una etiqueta con sus datos profesionales en vez de los datos sanguíneos usuales.
Sin embargo ésta es sólo la primera parte. Dos días después este director de arte realizó un e-mailing en forma de analítica sanguínea desvelando su identidad y su página web, donde poder ver algunos de sus trabajos. El objetivo, por supuesto, es darse a conocer, así como su trabajo, de una forma creativa ya que, tal y como explica Sergio de la Concepción «en estos tiempos de competencia feroz hay que diferenciarse para conseguir un trabajo».
